Entre los primeros platos podía elegir entre un Salmorejo de remolacha con cerezas y pepino, Ensalada de calabacín con envinagrados, sésamo y olivas, Ñoquis con salsa de espárragos y almendras o Zanahorias asadas con yogur de avena, especies y hierbas.

Foto: Eva Bronzini
El restaurante slowfood Gatblau de Barcelona es desde hace tiempo uno de mis preferidos. Su filosofía de producto de calidad, su dieta sostenible y saludable, y su compromiso con los proveedores encaja con mi forma de ver la vida y los negocios.
Me encanta el gazpacho y me gusta el salmorejo, en ese orden. Si hubiese habido ambas opciones seguro hubiera apostado por la primera. Y si hubiese habido gazpacho, ahora no sabría lo que es el “Salmorejo” de remolatxa amb cireres i cogombre del Gatblau.
Dije que tenía que escribir un breve post sobre ese plato. No hice foto y me lamento tantísimo. Porque no solo era un plato celestial, sino también apeteciblemente puesto en escena. Su textura era de salmorejo, su sabor gustosamente estructurado y el conjunto rimaba; un verdadero sueño. Nunca he probado un salmorejo de remolacha tan especial. El mejor salmorejo de mi vida.
Bravó Gatblau, sois los mejores.
Restaurant Gatblau, Compte Borrell 122, Barcelona. Tf. 933 25 61 99